3. Roca Kjerag (Noruega)
Encajada entre dos paredes totalmente verticales, esta roca está colgando a 1.000 metros de altura sobre el fiordo de Lyse. Siendo el atractivo principal del lugar, lo habitual es ver a los turistas hacerse fotos posando sobre ella, siendo todo un desafío al vértigo. Sólo los más valientes logran sostenerse sin temblor en sus piernas.