Venezuela es un desastre. Hugo Chávez, elegido en 1998, causó una serie de problemas y la nacionalización de las reservas de petróleo del país creó más. El dinero que se suponía iba a la gente terminó siendo canalizado hacia los altos funcionarios del gobierno. Con su muerte, Nicolás Maduro llegó al poder y desde entonces, las cosas se han deteriorado aún más. La moneda del país es casi inútil, y su economía está en serios problemas.