Conoció a su ex novio en 2011 en la universidad, tuvieron una conexión casi instantánea y empezaron a salir al poco tiempo. Después de una relación de dos años y medio se comprometieron, iban a casarse en noviembre de 2014.
Shelby Wink, de 23 años, estaba completamente segura del paso que iba a dar, planificó con todo su corazón la boda, cuidando cada detalle para que el día de su boda fuera perfecto.
Ese día quería comprometerse a pasar el resto de su vida con ese hombre, celebrando el inicio de una nueva etapa en su vida.
Faltando solamente una semana para el gran día, el prometido se reunió con Wink y le confesó que no quería casarse con ella pues ya no estaba enamorado y no se encontraba en condiciones de aceptar pasar el resto de su vida con ella. Wink quedó en shock y sintió que el mundo se le venía encima, todos los planes quedaron en el suelo.