La corrupción es un mal que aqueja a todo el mundo, aunque en algunos países se presenta de manera más descarada. O peor aún, en ciertos casos la corrupción es tan enorme que abarca a más de una nación al mismo tiempo, como sucede actualmente con el caso de la constructora brasileña ‘Odebrecht’, que ya ha salpicado al menos a 10 países de Latinoamérica.
Tristemente, Colombia no ha sido ajena a la corrupción, por el contrario ha sido víctima de ella en diferentes sectores, desde la salud, pasando por las construcciones y servicios públicos, hasta subsidios alimentarios. Aunque irónicamente, este país no está incluído dentro del listado de los 15 más corruptos del mundo.
Estos han sido algunos de los casos más descarados de corrupción que se han presentado en Colombia. Algunos de ellos aún están bajo investigación.
1.Odebrecht (2009-2014)
En 2015 brasil comenzó a tambalear cuando comenzó la investigación por la trama de corrupción desde Petrobras. En ese entonces se capturó a Marcelo Odebrecht, presidente de la prestigiosa empresa constructora y desde ese entonces se ha querido saber a quiénes le pagó millonario sobornos para conseguir adjudicaciones de construcción.
Luego, a finales de Diciembre de 2016, el Departamento de Justicia de los Estados Unidos publicó una investigación sobre la constructora que especifica que habían realizado sobornos a funcionarios públicos de los gobiernos de 12 países para obtener beneficios en contrataciones públicas, entre ellos, Colombia. Por si fuera poco, no solo se sobornó sino que dinero de Odebrecht llegó hasta las elecciones presidenciales de ese país, financiando al candidatura de Óscar Iván Zuluaga (eso aún está en investigación).
Se realizaron investigaciones dentro de Colombia y en enero se produjo la primera captura de este caso, la del ex-Viceministro de Transporte Gabriel García Morales, a quien se le imputaron cargos de enriquecimiento ilícito, cohecho y celebración indebida de contratos. La Fiscalía comprobó que García Morales exigió la suma de $6.5 millones de dólares a Odebrecht para garantizar que fuera la firma a la que se le adjudicará la construcción de de la Ruta del Sol Tramo Dos, una importante vía nacional, excluyendo a otros competidores.
La segunda captura fue contra del ex-senador Otto Nicolás Bula; quien habría sido contratado por la sucursal de Odebrecht en Colombia el 5 de agosto de 2013, con el fin de que el ex-senador obtuviera el contrato para hacer la vía Ocaña-Gamarra en favor de la Concesión Ruta del Sol S.A.S., del cual Odebrecht es parte. Para lograrlo hubo un soborno de la firma por valor de $4.6 millones de dólares para que el proyecto no fuese sometido a una licitación.
Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, se estima que los sobornos pagados por Odebrecht en Colombia rodean los $11 millones de dólares entre los años 2009 y 2014.