Sabemos muy bien que la sociedad occidental, en general, está obsesionada con la apariencia, en cómo lucimos, cómo ser delgados, cómo mantenernos jóvenes e incluso a veces pasando por encima de las verdaderas necesidades de las personas, desvalorizando a algunos según como se ven en vez de cómo son.
En ese sentido, la ex modelo Breanne Rice trató durante toda su carrera de esconder una parte de sí que creía “fea”. Ella padece desde los 19 años de vitiligo, una enfermedad autoinmune que hace que la piel pierda pigmentos y luzca con “manchas”.
El vitiligo afecta a sólo el 1% de las personas en el mundo y, aunque no es una enfermedad contagiosa, quienes la sufren se sienten cohibidos de mostrarla a los demás por la apariencia que genera en la piel.
Por suerte, nuestra percepción de la belleza es cada vez más amplia e inclusiva. Tenemos el ejemplo de la supermodelo Winnie Harlow, quien también tiene vitiligo; ella se convirtió en la vocera que promueve aceptar nuestras características únicas, incluso si la sociedad nos quiere decir que estamos «mal».
Quizás inspirándose en Harlow, Rice decidió mostrar al mundo su verdadera cara; ella es una ex modelo y apareció también en el reality show: «The Bachelor». Hoy en día, ella tiene un sitio web y escribe sobre salud y bienestar.
La hermosa modelo pasó 12 años ocultando su condición de la piel bajo gruesas capas de maquillaje, le preocupaba sobre todo la pérdida de pigmento en su cara. Pero un día, ella se cansó de guardar ese secreto.
«En el último par de años he decidido que no quiero sentirme así nunca más«, explicó en una publicación en Instagram. «Me la pasaba a los 20 años con una sensación de inseguridad y basando mi autoestima en cómo me veía y yo no quería mirarme en el espejo y preocuparme por no tener la piel perfecta«.
Así que decidió dejar de ocultar su vitiligo bajo el maquillaje y que el mundo supiera cómo realmente ella lucía ya que su belleza y su valor no estaban determinados por la forma en que se veía su piel, siguiendo patrones preestablecidos de lo que “debería” ser bello.
Como ahora se siente mejor consigo misma, luce más hermosa que nunca; ella también ha hecho algunos cambios en su estilo de vida para recuperar su sistema inmunológico. Según cuenta, esto ha incidido en revertir un poco el proceso de la pérdida de pigmentos en su piel.
Ella aún está consciente de las precauciones que tiene que tomar para cuidarse, tal como evitar el sol para proteger las áreas no pigmentadas de la piel. Pero su mayor transformación fue interna, ya que le permitió aceptarse a sí misma por quien era.
Rice afirma que todavía debe seguir trabajando sobre su confianza, pero es algo en lo que ha progresado mucho con su dedicación. Aún se maquilla, pero ahora lo hace porque quiere y no porque tiene que hacerlo.
Entre tanto, se concentra en amarse a sí misma: «No hay mucho que pueda hacer al respecto», dice refiriéndose a su piel. «Sólo puedo amarme a mí misma y no dejar que mis circunstancias definan mi valor o autoestima«.
Esta bella ex modelo inspira con su historia para que todos seamos valorados como individuos únicos, ella le envía un mensaje a todo el mundo: «Tal vez usted tiene algo sobre sí mismo que lo hace sentir inseguro. No deje que esto lo defina. Usted merece amor y es una persona hermosa«.
Si quieres saber más sobre el vitiligo y sobre Rice puedes conocer su historia en su sitio Web o en su Instagram. Esperamos que historias como ésta ayuden a fomentar la aceptación y la autoestima en quienes sufren por algún tipo de discriminación.
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