Sabemos que las populares Kardashian tienen millones de seguidores en todo el mundo, ellas marcan tendencias en peinados, maquillaje, estilo y formas de vida, muchos quieren lucir como ellas, pero ¿hasta dónde es suficiente?, ¿cuál sería el límite entre querer imitarlas y la obsesión insana?
Pues resulta que James Holt, un joven de 22 años de Manchester, ha llevado su fanatismo a lugares inimaginables. Es tanta su obsesión por las Kardashian que incluso, ha gastado miles de dólares en cirugía plástica para lucir físicamente como ellas.
A los 17 años se realizó su primera intervención estética; en un salón de Botox se inyectó los labios, y como la inyección inicial de 1,5 ml no causó una gran impresión en sus compañeros de clase en la escuela, decidió inyectarse más.
«Al final de la semana tenía 6 ml en los labios y todo el mundo dijo que le parecía increíble. Me encantó mi look; mis labios eran grandes y jugosos y era justo lo que quería».
A pesar de que le gustó como lucía, se le filtró un poco del relleno de sus labios, por lo que tuvo que cambiar de sitio para seguir con el aumento de los mismos.
En total invirtió 13 mil dólares en los labios y en rellenarse las mejillas. Cada dos meses debe volverse a inyectar para mantenerlos grandes y continuar con su apariencia “Kardashian”.
«Me encantan las Kardashian, especialmente Kylie y Khloe, pero aunque Kim ha pasado de moda ahora, me encanta su gran trasero y su pequeña cintura” publicó en sus redes. «Desde que Kylie comenzó a tener grandes labios hace un año, se ha puesto muy de moda. Los míos son más grandes que los de Kylie ahora».
Aún no le basta con la intervención de labios y mejillas, quiere que su cuerpo se asemeje al de Kim Kardashian. Aunque se ha tomado fotos usando una faja reductora de la cintura, quiere operarse para extraerse seis costillas y agregar grasa en el trasero para tener la forma corporal de reloj de arena de ella.
Sin embargo, su obsesión le ha traído numerosas críticas: “Mucha gente se da vuelta para mirarme por segunda vez, otras susurran cosas entre sí. Algunos son realmente audaces y vienen y dicen cosas como ‘Mira el estado de tu cara’ o ‘¿No tienes miedo de que tus labios exploten?’, pero no me importa. Si van a mirar, que miren. Me hago las cirugías para llamar la atención y en ocasiones la atención puede ser negativa” señala el joven Holt, quien asegura que no se detendrá hasta lograr lucir como quiere.
Para poder cubrir los casi 30 mil dólares que necesita para costear las cirugías que le harán lucir como las Kardashian, Holt cuenta con la ayuda económica de hombres mayores que le dan todo lo que él pide a cambio de fotografías suyas con poca ropa, aunque asegura que no tiene sexo de ningún tipo con ellos y ni siquiera acepta reunirse con estos hombres.
“Sólo mis dos principales benefactores me conocen y me he reunido con ellos, pero no he tenido una relación sexual con ninguno. No sé qué es lo que sacan de todo esto, no obtienen mucho de mí, simplemente me están haciendo feliz”, comenta James, que se define como asexual y declara que siempre ha sido y será soltero.
Por lo pronto, viajará a Polonia para un implante de mentón, operarse los pies e inyectarse grasa en el trasero: “Voy a llegar a ser totalmente artificial, no voy a parar ante nada», dijo. «Mi objetivo es lucir genial y vivir en una casa agradable, con un buen auto y realizarme toda la cirugía plástica que quiera«.
¿Y tú qué piensas de esta obsesión por las cirugías plásticas y por las Kardashian?
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