Convivir con tu hermana implica aquella eterna rivalidad donde sólo la más apta dentro esa batalla de egos puede salir victoriosa. Nunca olvides que, más que una hermana, siempre será tu mejor amiga.
1. ¡Escape!
Cuando estás husmeando en el cuarto de tu hermana y escuchas que sube las escaleras.
2. ¡Ataque!
Sólo espera usar una de sus prendas de vestir.