El adiós a Fidel Castro se vive entre lamentos y celebraciones. Desde que se supo de la muerte del expresidente cubano el pasado 25 de noviembre de 2016, se convirtió sin duda en uno de las noticias más importantes de este año que termina y ha sido la causa de enfrentamientos de opiniones alrededor de él.
Por un lado, están sus seguidores quienes lamentan la partida del eterno comandante, del líder de la revolución, de un hombre que nunca se doblegó ante los Estados Unidos, al que la CIA nunca pudo matar, quien logró que Cuba sobreviviera tantos años a pesar de los bloqueos económicos y del hombre en el que ven un ejemplo a seguir.
No cedió, fue implacable. Se alió con la Unión Soviética, envió ejércitos a África, fomentó guerrillas e inspiró a millones de personas. Como sea, su muerte marca el fin de una era para Cuba.
Estudiantes, profesores y directivos de la UH en marcha apretada hacia la Plaza de la Revolución #HastaSiempreComandante #FidelCastro pic.twitter.com/aoSAUTEF12
— Universidad de La Habana (@UdeLaHabana) November 28, 2016
Pero por el otro lado, están quienes aliviados respiran porque murió un déspota, dictador, tirano, cruel y un farsante hombre que solo trajo desgracias al pueblo cubano. Tanto así, que en Miami la comunidad cubana salió de fiesta a celebrar la muerte de Fidel Castro.
Arriving to #Calle8 in #Miami #FidelCastro pic.twitter.com/H0EluQ0In2
— Camila Mendoza (@camila_mendoza) November 26, 2016
Fue una de las figuras más queridas y odiadas del último siglo y que pasará a la historia, ya sea como un héroe o un Villano. Fue uno de los mejores oradores del siglo XX, derrocó a la dictadura de Fulgencio Batista, ejecutó a sus opositores, silenció a la prensa y miles de cubanos se exiliaron. Incluso famosos como Celia Cruz y Emilio Estefan sufrieron a causa del exilio.
«El daño que se hizo todos estos años ya es irreversible. Él [Castro] me quitó mi niñez y a mi madre. Me tuve que hacer hombre a los 11 años y salir del país para salvar a mi familia«, dijo Estefan al Diario Las Américas.
Fidel hizo la primera revolución socialista en el hemisferio, pero los crímenes de la revolución también son conocidos, violó derechos humanos y civiles. Su país sobrevivió durante 50 años al embargo de los Estados Unidos, a costa de hambre y pobreza de en Cuba, aunque según la UNICEF Cuba era el único país de América sin desnutrición infantil.
Así despertó el metro de Madrid este lunes, las muestras de admiración por #FidelCastro son visibles en todo el mundo #FidelVive pic.twitter.com/66VZ5fTcGt
— Periódico Granma (@Granma_Digital) November 28, 2016
Es cierto que en Cuba en acceso a salud, vivienda y la educación mejoraron notoriamente con la revolución. En teoría no se acumulan riquezas, porque todo es para el pueblo.
Pero paradójicamente, de Fidel Castro se sabe que vivía entre lujos, tanto así que dejó una fortuna de alrededor de 900 millones de dólares, según la revista Forbes. Es ahí donde la incoherencia y doble moral se ponen sobre la mesa.
La doble moral de Fidel Castro y la mayoría de los izquierdistas. #Cuba pic.twitter.com/51gXSsFnzc
— Patria Orgullosa. (@patriaorgullosa) November 28, 2016
También es cierto que ayudó en otros procesos sociales del mundo, fue aliado del Nelson Mandela, amigo de Gabriel García Márquez, vio lo que era un levantamiento popular en el ‘bogotazo’, y él junto al Ché Guevara que convirtieron en ídolos y la marca de la revolución. pero en su propia isla la ‘libertad’ es algo que nunca existió.
No se podía cuestionar al régimen, no hay democracia participativa, no se puede hacer oposición. Si no te gusta, te mueres, vas a la cárcel o eres exiliado.
#Cuba La prensa oficial dice que hay pocas personas en la calle porque están recogidas en su dolor… lo cierto es que hay miedo, mucho miedo
— Yoani Sánchez 🇨🇺 (@yoanisanchez) November 28, 2016
La represión en Cuba es real, por el simple hecho de intentar ejercer el derecho a la libre expresión las personas van a la cárcel. El bloqueo de Internet también es real, según Amnistía Internacional » solo el 25% de la población en Cuba puede navegar por un internet limitado y solo el 5% de los hogares tienen acceso».
Es así como eran las cosas con Fidel Castro, y ahora su muerte deja la incertidumbre de cuánto más durará la hegemonía castrista con su hermano Raúl al mando.
Lo llaman valiente, pero para analistas como Andrés Oppenheimer no lo es, porque fue un líder que en en más de 57 años no permitió partido opositor, ni elecciones libres, ni medios de comunicación independiente, fusiló a más de 3000 personas por oponerse a sus políticas. No se trata de alegrarse por la muerte de otro ser humano, pero tampoco de idolatrar a una persona que tanto daño hizo.
Una de sus frases más famosas fue «Ni los muertos pueden descansar en paz en un país oprimido”, tal parece que él no podrá descansar ni que la historia lo absolverá.