Las personas mentalmente fuertes tienen hábitos saludables. Manejan sus emociones, pensamientos y comportamientos de manera que los preparan para el éxito en la vida. Eche un vistazo a estas 13 cosas que las personas mentalmente fuertes no hacen para que usted también pueda volverse mentalmente más fuerte.
Personas mentalmente fuertes: No pierden el tiempo compadeciéndose de sí mismos
Estas personas no se sientan sintiendo pena por sus circunstancias o por cómo los han tratado los demás. En cambio, asumen la responsabilidad de su papel en la vida y entienden que la vida no siempre es fácil o justa.
Personas mentalmente fuertes: No regalan su poder
No permiten que otros los controlen, y no le dan poder a nadie más sobre ellos. No dicen cosas como: «Mi jefe me hace sentir mal», porque entienden que tienen el control de sus propias emociones y pueden elegir cómo responder.
Personas mentalmente fuertes: No rehúyen el cambio
Este tipo de personas no intentan evitar el cambio. En cambio, dan la bienvenida al cambio positivo y están dispuestos a ser flexibles. Entienden que el cambio es inevitable y creen en su capacidad de adaptación.
Personas mentalmente fuertes: No desperdician energía en cosas que no pueden controlar
No escuchará a una persona mentalmente fuerte quejándose por la pérdida de equipaje o los atascos de tráfico. En cambio, se enfocan en lo que pueden controlar en sus vidas. Reconocen que, a veces, lo único que pueden controlar es su actitud.
No se preocupan por complacer a todos
Estas personas reconocen que no necesitan complacer a todos todo el tiempo. No tienen miedo de decir que no o de hablar cuando es necesario. Se esfuerzan por ser amables y justos, pero pueden soportar que otras personas se molesten si no los hacen felices.
No temen tomar riesgos calculados
No toman riesgos imprudentes o tontos, pero no les importa tomar riesgos calculados. Las personas mentalmente fuertes dedican tiempo a sopesar los riesgos y los beneficios antes de tomar una gran decisión, y están completamente informadas de las posibles desventajas antes de actuar.
No viven en el pasado
Las personas mentalmente fuertes no pierden el tiempo pensando en el pasado y deseando que las cosas sean diferentes. Reconocen su pasado y pueden decir lo que han aprendido de él.
Sin embargo, no reviven constantemente malas experiencias ni fantasean con los días de gloria. En cambio, viven para el presente y planean para el futuro.
No cometen los mismos errores una y otra vez
Las personas mentalmente fuertes aceptan la responsabilidad de su comportamiento y aprenden de sus errores del pasado. Como resultado, no siguen repitiendo esos errores una y otra vez. En cambio, siguen adelante y toman mejores decisiones en el futuro.
No les molesta el éxito de otras personas
Las personas mentalmente fuertes pueden apreciar y celebrar el éxito de otras personas en la vida. No se ponen celosos ni se sienten engañados cuando otros los superan. En cambio, reconocen que el éxito viene con trabajo duro y están dispuestos a trabajar duro para tener su propia oportunidad de éxito.
No se dan por vencidos después del primer fracaso
Las personas mentalmente fuertes no ven el fracaso como una razón para rendirse. En cambio, usan el fracaso como una oportunidad para crecer y mejorar. Están dispuestos a seguir intentándolo hasta que lo hagan bien.
No temen el tiempo a solas
Las personas mentalmente fuertes pueden tolerar estar solas y no temen al silencio. No tienen miedo de estar solos con sus pensamientos y pueden usar el tiempo de inactividad para ser productivos.
Disfrutan de su propia compañía y no dependen de los demás para tener compañía y entretenimiento todo el tiempo, sino que pueden ser felices solos.
No sienten que el mundo les deba nada
Las personas mentalmente fuertes no se sienten con derecho a las cosas de la vida. No nacieron con la mentalidad de que otros cuidarán de ellos o que el mundo debe darles algo. En cambio, buscan oportunidades basadas en sus propios méritos.
No esperan resultados inmediatos
Ya sea que estén trabajando para mejorar su salud o poner en marcha un nuevo negocio, las personas mentalmente fuertes no esperan resultados inmediatos. En cambio, aplican sus habilidades y tiempo lo mejor que pueden y entienden que el cambio real lleva tiempo.