Comer no debería ser solo una acción de sobrevivencia, de hacerlo porque toca o si no te mueres. Debería ser una experiencia única, para disfrutarla al máximo y experimentar.
Para los que les gusta probar cosas nuevas, locas, extrañas, atrevidas o simplemente diferentes, les tenemos varias recomendaciones para comer delicioso y pasar un muy buen rato en Buenos Aires.
No importa si eres argentino o no, estos restaurantes y bares te van a encantar y te van a dejar con mucha curiosidad.
1. Johnny B. Good
¿Te gusta el ‘rock & roll’? Entonces te va a encantar este restaurante, que es una casa de la música, ideal para visitarlo después de un día de trabajo muy pesado.
Puedes hacerte dentro o en la terraza (recomendada), comerte una hamburguesa deliciosa y disfrutar del ambiente musical que es buenísimo para cualquier melómano. Estate pendiente de este lugar, porque también organizan presentaciones en vivo con grupos musicales muy buenos de la ciudad.
![Chuck Berry - Johnny B. Goode [HQ]](https://i.ytimg.com/vi/I8JULmUlGDA/hqdefault.jpg)
Las paredes del Johnny B. Good están llenas de impactantes imágenes que rinden tributo a los principales iconos de la música internacional, desde el origen mismo del rock hasta la actualidad, y pasando por otros géneros musicales de hoy. Y como lo importante es la música, cuenta con tecnología de avanzada en audio y video, con LCD, pantallas y cortinas de led, y cabinas de completamente digitalizadas, ideales para las presentaciones de Dj´s (residentes o invitados), artistas, bandas en vivo, show, etc
Puedes visitarlo a cualquier hora, es bueno para almorzar, merendar, o simplemente para compartir un café o una cerveza con amigos.
2. Sabor a Tango
Argentina no sería tan famosa en el mundo entero si no fuera por el tango y la milonga, entonces si quieres descubrir algo de este estilo, visita ‘Sabor a Tango’, uno de los más tradicionales restaurantes en Buenos Aires. En un edificio histórico, clásico, elegante y con toda la onda romántica es un lugar que cautiva, y por supuesto, ¡hay shows de tango!
De hecho, el espectáculo de tango es lo que más atrae tanto a turistas como locales, por lo que el restaurante cuenta con un escenario solo para eso.
Este bello restaurante funciona en el antiguo Palazzo Rossini, histórico edificio de la Societá Italia Unita, construido íntegramente con materiales traídos desde Italia en el año. Una verdadera joya.
Es el bar temático que ostenta todos los elementos esenciales para que sus visitantes se sientan en confort y disfruten al máximo. Y si te dan ganas, puedes tomar clases de tango allí.
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3. Arte de mafia
Se trata del primer restaurante temático mafioso en Argentina, para los que aman las historia de gangsters italianos. El lugar busca llevarnos atrás, remontarnos a aquellas épocas en las que se hacían alianzas alrededor de un buen plato de comida italiana, por lo que la especialidad de la casa son las pastas, ñoquis, osobuco y canelones, entre otros.
La ambientación en el tema de la mafia es un detalle simpático e interesante, te vas a sentir como si estuvieras dentro de películas como «El Padrino» o «Buenos Muchachos».
4. El Centro Argentino de Teatro Ciego
Este sin duda es una experiencia única, porque se trata de comer en la oscuridad, ideal para una cita a ciegas, para encender el romance con tu pareja.
En el Centro Argentino de Teatro Ciego vas a vivir una cena sin ver (absolutamente nada), donde tendrás que guiarte por el olfato, el tacto y el gusto. Y como su nombre lo indica, también hay teatro.
El restaurante está abierto los jueves y viernes a partir de las 21 horas y si deseas ir es mejor hacer una reserva previa.
5. The Green Club
Si eres de gustos más sofisticados como el golf, en Buenos Aires también hay un rincón para que vayas a comer y disfrutes de este deporte. Es un sitio único, no solo en esta ciudad sino en toda Latinoamérica.
The Greem Club es un restaurante con propuestas gourmet que está ubicado dentro de un campo de golf. Es ideal para toda ocasión este lugar ofrece opciones para almuerzos, tomar el té e incluso para después de trabajar. También sirve ricas picadas acompañadas de los mejores vinos.
6. Hello Doris
En realidad es más bar que restaurante, pero es tan ingenioso que no lo podíamos dejar por fuera. Es para los amantes de lo retro y la moda ‘pin-up’, este lugar es súper copado. Es un bar con la mejor onda de los años 50, y con mucho encanto. De hecho, la mística no termina ahí, porque para poder entrar a este mundo exclusivo, tienes que solicitar un código secreto. (En otras palabras, debes reservar).
Dirección: Arévalo 3031, Las Cañitas, CABA
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7. Lo De Néstor
¿Vamos a lo de Néstor? En realidad es un muy buen plan entre amigos para disfrutar de unas cervezas. Y si te preguntas cuál Néstor, pues es realidad es un lugar temático sobre Néstor Kirchner, que los argentinos saben quien es, pero si no eres de allá te contamos que fue un político (ya falleció), expresidente y también era el esposo de la expresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner.
Las opiniones sobre la atención son excelentes, asó como de la calidad y el precio. Dicen que las porciones son abundantes y que las cervezas artesanales son deliciosas. Es un lugar 100% argentino y el bar de la economía social.
8. La Brigada
¿Qué es lo más famoso de la comida argentina?, la carne, un buen churrasco. Si pensabas que faltaba algo de parrilla, La Brigada es una excelente y muy pintoresca opción.
La temática de La Brigada es de fútbol, pero no solo argentino, sino de las mejores ligas del mundo. Es una combinación ganadora: lo mejor del fútbol y las mejores carnes, solo te hace falta la mejor compañía (esa la llevas vos).
9. Te Mataré Ramirez
Este es de los que hay que ir en pareja, pero cálmate que no es para matar a nadie, sino todo lo contrario, es para encenderte, porque en teoría es un restaurante con temática afrodisíaca.
La propuesta de Te mataré Ramirez combina platos afrodisíacos de autor, con shows de teatro erótico, jazz y bosa, cabaret, danza teatro, títeres pornográficos y arte plástico erótico.
10. La silla eléctrica
Y para cerrar vamos con algo muy divertido, no tiene nada que ver con cárceles o presos, de hecho en este edificio funcionó la primera escuela de mujeres conocida como el Liceo, y luego pasó a ser una galería artística, fue ahí que nació La Silla Eléctrica, un bar que continúa la temática artística de la galería.
Es como especie de refugio para los lugareños, pues a diferencia de otros sitios éste tiene las puertas abiertas hasta la medianoche.
La decoración es rústica, con tachos de pintura colgando de la barra, una simulada silla eléctrica con juego incluido para beber; también hay ciclos de música en vivo, exposiciones de fotos y ‘stand up comedy’ para reír hasta que te duela la barriga.
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