Tal vez al iniciar el día, necesitas tomar una taza de café para comenzar con energía. Pero, no estás solo, hay toda una cultura enloquecida por el café. Sin embargo, ¿te has preguntado si puede el café causar depresión o ansiedad? Descúbrelo a continuación.
¿Puede el café causar depresión?
Según ciertas investigaciones, el café podría ser un factor protector contra la depresión e incluso se correlaciona con una reducción del suicidio. En este sentido, es un hallazgo sorprendente para los amantes del café y aquellos que enfrentan depresión o tendencias suicidas.
Sin embargo, aunque la investigación da alguna evidencia, siempre es importante recordar que cada uno de nuestros cuerpos reacciona de manera diferente a diferentes entornos, circunstancias o sustancias y hay muchas variables en juego.
Algunas de las variables a considerar en estos estudios incluyen el estilo de vida general de los sujetos y los grupos de control, así como si el café que estaban bebiendo tiene cafeína o era descafeinado. Pero, los resultados son alentadores.
Por otro lado, el café fue eliminado de la lista de alimentos cancerígenos de la OMS en 2016. La OMS incluso informa que el café puede proteger contra el cáncer de útero e hígado. Y varias otras organizaciones como el Fondo Mundial para la Investigación del Cáncer y el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU., también han declarado que el consumo de café con moderación puede tener efectos positivos en su salud y lo protegen de diversas formas de cáncer.
En lo que respecta a la depresión, se descubrió que hay otros componentes importantes además de la cafeína. Entre los que se destacan, el ácido clorogénico y el ácido ferúlico, los cuales reducen la inflamación de los nervios, factor presente en el cerebro de las personas que sufren de depresión.
¿Puede el café causar ansiedad?
Sin embargo, la investigación sobre si el café puede causar ansiedad, no es tan positiva para quienes padecen ansiedad como para quienes padecen depresión.
En general, se descubrió que si no sufre de ansiedad, es probable que el café no tenga un impacto demasiado negativo en usted cuando se consume con moderación. Sin embargo, cuando las dosis de cafeína aumentan a más de 400 mg por día, pueden aparecer síntomas asociados con la ansiedad, como inquietud, nerviosismo y dificultad para dormir.
En aquellos que sufren de ansiedad, se necesitará mucho menos para exacerbar sus síntomas de ansiedad ya presentes.
¿Cómo afecta el café a su estado de ánimo?
Cuando se trata de su estado de ánimo general, lo que debe pensar es cómo responde su cuerpo a la cafeína, aparte de la depresión o la ansiedad. Ya que nuestros cuerpos tienen diferentes sensibilidades a la cafeína.
Algunas personas pueden beber espresso justo antes de acostarse y no tienen problemas para dormir, pero para otras, podría ser una noche de inquietud. Y la falta de sueño contribuye a la irritabilidad, a una menor resistencia a lidiar con los factores estresantes de la vida, así como a otros indicadores de mala salud.
Dormir bien por la noche es esencial, especialmente cuando se trata de ansiedad crónica. Entonces, si cae en este campo, entonces podría ser bueno para usted moderar su consumo de café. O simplemente evaluar por sí mismo cuál podría ser el impacto de un período de tiempo sin cafeína.
Es importante que conozca su cuerpo y cómo reacciona a diferentes sustancias y entornos. Hacer un pequeño experimento contigo mismo puede ser una forma divertida de conocer y comprender tu cuerpo y cómo metaboliza la cafeína.
Conclusión sobre el café, la ansiedad y la depresión
En general, según la investigación, el café no va a erradicar ningún problema de salud mental, aunque no necesariamente parece causarlo. Lo más importante a considerar al pensar en el impacto del consumo de café en su ansiedad o depresión es que puede agravar los problemas del sueño. Lo cual, es una parte realmente importante de su cuidado personal cuando se enfrenta a cualquier problema de salud mental.
Tenga en cuenta
La cantidad de café que bebemos y sus impactos varían ampliamente dependiendo de muchos factores. La mejor opción para usted es conocerse a sí mismo, prestar atención a cómo le afecta el café, hablar con su médico y considerar las circunstancias de su vida personal. Seguir todos estos pasos lo ayudará a tomar una decisión informada por sí mismo, que probablemente cambiará con el tiempo.