Este aceite es un excelente aliado para el cuidado del cabello y de la piel. Conoce todos los beneficios del aceite de ricino para incorporarlo en tu rutina de belleza.
Origen y propiedades del aceite de ricino
El aceite de ricino también es conocido como aceite de castor o en inglés castor oil. Pero no tiene nada que ver con el animal del mismo nombre. Es un aceite vegetal que proviene de las semillas de un arbusto originario de África llamado Ricinus communis. Aunque es originario de África e India, también se cultiva en ciertas zonas de Europa, China y Brasil.
Estas semillas son tostadas y prensadas al frío para obtener un aceite de excelente calidad. El aceite de ricino contiene principalmente, ácido ricinoleico, también conocido como omega 9. Así mismo, contiene ácido oleico, ácido linolénico u omega-6, ácido palmítico y ácido esteárico. De igual modo, es rico en vitamina E y minerales.
Debido a su contenido de ácidos grasos, vitaminas y minerales tiene propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antifúngicas y antibacterianas. También es humectante, emoliente y favorece el crecimiento capilar.
Si se ingiere puede ser un laxante. Sin embargo, no debe consumirse sino bajo estricta recomendación médica, ya que puede ser tóxico y causar un desequilibrio en los procesos digestivos.
Se recomienda su uso externo solamente y solo en caso de no padecer ninguna afección en la piel o el cuero cabelludo. En caso contrario, se recomienda consultar a su dermatólogo tricólogo antes de usarlo.
Beneficios del aceite de ricino
Como mencionamos previamente, debido a su composición es un excelente aliado en la cosmética para el cuidado de la piel y del cabello.
Beneficios del aceite de ricino para la piel
El aceite de ricino puede usarse como un desmaquillante natural como primer paso de la doble limpieza en tu rutina del cuidado de la piel. Ayuda a remover el maquillaje a su vez que desinflama el rostro sin resecarlo. Si padeces de acné o tienes piel grasa consulta a tu médico antes de usarlo.
Otro beneficio para la piel es que ayuda a sellar la humedad en el rostro o el cuerpo, aporta emoliencia, suavidad y puede prevenir el envejecimiento prematuro. Puedes usarlo puro o en cremas que lo contengan.
También puede ayudar a minimizar la apariencia de las estrías o cicatrices en la piel. Es ideal para ser empleado en masajes relajantes y para suavizar las áreas más ásperas del cuerpo como codos o talones.
Debido a su acción anti-inflamatoria puede aliviar la irritación de la piel, la comezón por picaduras de mosquitos y la inflamación por la exposición al sol.
Beneficios para el cabello
El aceite de castor también aporta beneficios para el cabello, cejas, barba, pestañas y uñas. En este sentido, contribuye a sellar la humedad en el cabello, humecta, nutre, da brillo y suaviza las hebras capilares.
Por su acción anti-inflamatoria, antifúngica y anti-bacteriana, puede regular la producción de sebo en el cuero cabelludo, pero se recomienda usar un champú que ya lo contenga en su fórmula. No se recomienda aplicar directamente el aceite en el cuero cabelludo ya que podría causar una obstrucción de los poros.
Debido a sus nutrientes, antioxidantes y minerales, promueve la estimulación del crecimiento de las cejas, pestañas y la barba. Hay que aplicar una pequeña cantidad en el área limpia y en el caso de cejas y pestañas, tener cuidado de que no entre a los ojos para evitar irritaciones.
Sin embargo, no es una fórmula milagrosa, es un complemento que favorece el crecimiento que debe ser acompañado de una dieta rica en nutrientes y otros hábitos saludables como reducir el estrés y dormir lo suficiente cada noche.
Ya conoces los beneficios del aceite de ricino para el cabello y la piel. Si observas alguna reacción desfavorable o irritación al usarlo, suspende su uso y consulta a tu médico.