Atención usuarios de teléfonos Samsung, deben tener cuidado: un hombre de Sonora (México) sufrió quemaduras de primer y segundo grado después de que su teléfono celular Samsung explotara en el bolsillo de sus pantalones.
Carlos Iván Baca Torres, un empleado de 37 años de una firma de servicios de limpieza, estaba trabajando el 31 de marzo en un pueblo remoto de Nuevo Guaymas cuando escuchó un ruido extraño. Sonaba como la liberación de gas bajo presión, y venía de su bolsillo.
Los instintos se activaron de inmediato y fue a quitarse los pantalones, pero no fue lo suficientemente rápido y el teléfono inteligente J7 Prime explotó, lesionándose la pierna.
Testigos del accidente le dieron a Baca una inyección contra el tétanos y aplicaron un ungüento sobre la piel quemada antes de que lo llevaran al Hospital General de Guaymas para que lo trataran.
La gravedad de las lesiones de Baca fue suficiente para mantenerlo alejado del trabajo durante 18 días y le costó 5.000 pesos (260 dólares) en costos médicos.
En un intento por obtener una compensación por las lesiones y las horas de trabajo que perdió, Baca consultó a la agencia de protección al consumidor Profeco, donde se le aconsejó que solicitara un nuevo teléfono al fabricante y contratara a un abogado para demandar por daños y perjuicios.
Baca ya había ido a Samsung, cuyo representante del fabricante en Ciudad Obregón ofreció reemplazar el teléfono dañado pero solo después de que Baca firmara una exoneración de responsabilidad liberando a la compañía de hacerse cargo de los costos de la explosión.
Baca ahora debe encontrar al menos 5.000 pesos para contratar a un abogado y comenzar el proceso de denuncia con la esperanza de obtener un reemplazo de teléfono y una compensación.
Ha habido historias durante algunos años sobre la explosión de teléfonos celulares, pero los productos de Samsung se encuentran entre los más susceptibles. El más notorio fue su «Galaxy Note 7», del cual tuvo que retirarse toda la producción debido a un defecto en las baterías de los teléfonos que causó que algunos generaran calor excesivo, lo que provocó incendios.
El dispositivo se suspendió menos de dos meses después de su lanzamiento mundial.