Tal vez la película distópica más pesadillesca de 2017 no vino de Hollywood. Críticos de armas autónomas, dirigidos por un profesor universitario, organizaron un espectáculo de terror.
Es un video de siete minutos, una colaboración entre el profesor Stuart Russell de la Universidad de California-Berkeley y el Future of Life Institute que muestra un futuro en el que aviones no tripulados autónomos utilizan tecnología de reconocimiento facial y explosivos a bordo para cometer masacres imposibles de rastrear.
La película es el último intento de los investigadores de crear apoyo para una prohibición global de los sistemas de armas autónomas, que matan sin un control humano significativo.
El video fue estrenado para coincidir con las reuniones que la Convención de las Naciones Unidas sobre Armas Convencionales realizó en Ginebra, Suiza, para discutir sobre armas autónomas.
«Tenemos la oportunidad de evitar el futuro que acaban de ver, pero la ventana para actuar se está cerrando rápidamente«, dijo Russell, un profesor de inteligencia artificial, al concluir la película. «Permitir que las máquinas elijan matar humanos será devastador para nuestra seguridad y libertad«.
En la película, miles de estudiantes universitarios son asesinados en ataques a una docena de universidades luego de que drones invaden los campus. Algunos de los drones se apegan primero a los edificios, haciendo agujeros en las paredes para que otros drones puedan entrar y cazar a estudiantes específicos. Una escena similar se muestra en el Capitolio de los Estados Unidos, donde un selecto grupo de Senadores fue asesinado.
Tales atrocidades no son posibles hoy en día, pero dada la trayectoria del desarrollo de la tecnología, eso cambiará en el futuro. Los investigadores advierten que varias naciones poderosas están dirigiendo esfuerzos hacia el desarrollo de armas autónomas, y si una nación despliega tales armas, puede desencadenar una carrera armamentista global para ir al paso.
Debido a estas preocupaciones, los principales investigadores de inteligencia artificial han pasado varios años pidiendo la prohibición de las armas autónomas, que a veces se denominan «robots asesinos». Los investigadores advierten que algún día los terroristas podrán comprar y usar esos drones para matar fácilmente y en grandes cantidades.
«Una orden de 25 millones de dólares ahora compra esto, suficiente para matar a media ciudad«, describe un contratista de defensa en la película mientras enjambres de diminutos aviones no tripulados salen volando de un avión de carga.
La película es un giro sensacionalista en los enfoques que los críticos de armas autónomas han utilizado para presionar por una prohibición. En el pasado, confiaban en cartas abiertas y peticiones con lenguaje académico. En 2015, miles de investigadores de Inteligencia Artificial y robótica se unieron a líderes tecnológicos como Elon Musk y Stephen Hawking para pedir la prohibición de armas autónomas ofensivas. Esa carta hablaba de «cuadricópteros armados», mientras que el video advierte sobre «slaughterbots».
A principios de noviembre, los principales investigadores de inteligencia artificial de Canadá y Australia pidieron a sus gobiernos que apoyaran la prohibición de los sistemas letales de armas autónomas.
Este nuevo enfoque parece ser el resultado de la aparente gravedad de la situación. Este verano, un informe del Centro Belfer de la Universidad de Harvard advirtió que las armas que usan inteligencia artificial serán tan transformadoras como las armas nucleares.