Johnny Depp, uno de los actores más talentosos pero también más rebeldes de Hollywood, está siendo demandado por un director de locación que trabajó en su próxima película «City of Lies» por presuntamente golpear al miembro del equipo durante la producción de la película.
En una copia de la demanda, obtenida por CNN, Gregg «Rocky» Brooks alega que Depp lo golpeó «con fuerza» dos veces en el costado inferior izquierdo de su caja torácica después de que le dijeron a Depp que la producción de la película debía suspenderse ese día.
El presunto incidente ocurrió en abril de 2017 cuando la película se estaba filmando dentro y alrededor del Hotel Barclay en el centro de Los Ángeles.
La demanda dice que Depp siguió gritando y regañando a Brooks hasta que los guardaespaldas de Depp sacaron al actor de «Piratas del Caribe» de la escena.
Brooks alega que el «aliento de Depp apestaba a alcohol» y dice que cree que Depp había estado bebiendo y consumiendo drogas en el set.
Un representante de Depp no ha hecho ninguna clase de comentarios sobre el incidente.
La demanda también nombra a la productora Miriam Segal y al director Brad Furman, así como a las productoras Good Films e Infinitum Nihil, la última de las cuales fue fundada por Depp.
Brooks afirma que fue despedido después de elegir no firmar un documento que establece que no demandaría a la producción por el incidente.
Furman y Good Films, que fue fundada por Segal, no respondieron de inmediato a una solicitud de comentarios.