Hay una razón por la cual, a lo largo de los Globos de Oro, las estrellas han estado susurrando su nombre como una oración: Oprah.
El discurso de aceptación de la reina por el estimado premio Cecil B. DeMille (esencialmente un premio de logros de por vida) en los Golden Globes el domingo por la noche, fue un grito de guerra para los privados de derechos que lograron articular perfectamente el momento #MeToo.
«No se me escapa que en este momento hay niñas mirando cuando me convierto en la primera mujer negra en recibir el mismo galardón«, dijo, refiriéndose a ver a Sidney Poitier de niña. «Es un honor y es un privilegio compartir la velada con todas ellas».
Congratulations @Oprah on your Cecil DeMille award at the #goldenglobes. You are amazing. 🙌🏾 Love, your friend on maternity leave
— Mindy Kaling (@mindykaling) January 8, 2018
“Felicitaciones @Oprah por su premio Cecil DeMille en #goldenglobes. Eres fabulosa. Con amor, tu amiga en licencia de maternidad”
Siendo Oprah, la mayor parte de su discurso de aceptación fue dedicado a honrar a los héroes de la historia marginados, sin voz y menospreciados que allanaron el camino para su éxito en la actualidad. Desde Poitier hasta Rosa Parks, Oprah compartió el honor con sus colegas revolucionarios, mientras hacía un llamado a la acción que con seguridad motivaría a los futuros revolucionarios para las generaciones venideras.
Dejaremos que Oprah se los diga:
“Lo que estoy segura es que decir tu verdad es la herramienta más poderosa que todos tenemos. Y estoy especialmente orgullosa e inspirada por todas las mujeres que se han sentido lo suficientemente fuertes y lo suficientemente empoderadas como para hablar y compartir sus historias personales. Cada uno de nosotros en esta sala se celebra debido a las historias que contamos y este año nos convertimos en la historia.
Pero no es solo una historia que afecta a la industria del entretenimiento. Es una que trasciende cualquier cultura, geografía, raza, religión, política o lugar de trabajo. Así que quiero que esta noche exprese mi gratitud a todas las mujeres que han soportado años de abuso y agresión porque, al igual que mi madre, tuvieron hijos que alimentar, facturas que pagar y sueños que perseguir.
Son las mujeres cuyos nombres nunca sabremos. Son trabajadoras domésticas y trabajadoras agrícolas. Están trabajando en fábricas y trabajan en restaurantes y están en academias, ingeniería, medicina y ciencia. Son parte del mundo de la tecnología, la política y los negocios. Son nuestras atletas en las Olimpiadas y son nuestras soldados en el ejército”.
No hace falta decirlo, pero Oprah cambió el panorama para las mujeres y las personas de color en Hollywood desde que nos honró en 1986 como la primera mujer en protagonizar, producir y poseer su propio programa de entrevistas. No ajena a la historia, el imperio que construyó no solo rompió los techos de cristal, sino que también ayudó a las personas necesitadas de todo el mundo.
Dirigiéndose al tema más candente de la noche, Winfrey continuó: «Durante demasiado tiempo, las mujeres no han sido escuchadas o se les ha creído si se atreven a decir la verdad sobre el poder de esos hombres. Pero se les acabó el tiempo«.
Gran parte de los Globos de Oro de 2018 destacaron a las mujeres que luchan con uñas y dientes para garantizar que esto no sea sólo un momento pasajero en Hollywood, sino el primer paso para terminar de forma permanente con la misoginia y la discriminación generalizadas. Y con los líderes y las voces como Oprah, el impulso parece imparable.
«Quiero que todas las chicas miren aquí, ahora, para saber que un nuevo día está en el horizonte«, dijo. «Y cuando ese nuevo día finalmente amanezca, será por la gran cantidad de mujeres magníficas, muchas de las cuales están aquí en esta sala esta noche, y algunos hombres fenomenales, luchando duro para asegurarse de que se conviertan en los líderes que nos llevan hasta el momento en que nadie tiene que decir #MeToo de nuevo «.
Sí, estamos llorando.
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