El aceite de jojoba es muy apreciado por sus usos en la cosmética. Descubre qué es, cuáles son sus propiedades, usos y beneficios para el cabello y la piel.
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Qué es el aceite de jojoba
El aceite de jojoba es aquél que se extrae de las semillas del arbusto llamado Simmondsia chinensis, originario de las zonas desérticas del sur de Estados Unidos y del norte de México. De las semillas que contienen ésteres líquidos (cera) se extrae por prensado mecánico. Es de color dorado brillante y está compuesto principalmente por ceramidas. Debido a esto, es estable al calor y no se oxida fácilmente como otros aceites.
De igual manera, las ceramidas de este aceite se asemejan a las de nuestra piel por lo tanto, es apto para todo tipo de pieles. Estas ceramidas ayudan a regular la hidratación y la producción de sebo.
Este aceite es rico en vitamina E y ácidos grasos, en este sentido, tiene propiedades antioxidantes, humectantes, nutritivas, antifúngicas y es desinflamatorio.
Beneficios
Por su contenido de ceramidas, este aceite es seborregulador, contribuye a equilibrar el exceso de grasa producido por la piel o el cuero cabelludo. Ayuda a humectar el cabello y a sellar la hidratación. También le aporta flexibilidad, nutrición y brillo, por lo tanto, es ideal para cabellos opacos y quebradizos.
Por su parte, en la piel también ayuda a regular la producción de sebo. En este sentido, es ideal para pieles grasas o mixtas. También contribuye a retener la humedad en la piel. Es de fácil absorción y no deja sensación grasosa.
Por su acción antioxidante previene el envejecimiento prematuro, atenúa las líneas de expresión y refuerza la barrera natural de la piel. Además, contribuye a mejorar la apariencia de la piel, disminuyendo cicatrices y estrías. Alivia la irritación y suaviza la piel.
Puedes usarlo puro o en productos para el cuidado capilar o de la piel. Recuerda que su uso no sustituye ningún tratamiento médico. En caso de padecer acné, dermatitis, eczemas o afecciones capilares como caspa y sensibilidad, entre otras, consulta a un dermatólogo o especialista para que te indique el tratamiento adecuado.