El líder norcoreano Kim Jong Un ha notificado oficialmente a Estados Unidos su voluntad de discutir la desnuclearización en una cumbre planificada con el presidente Donald Trump, dijeron el domingo funcionarios de Estados Unidos, según Reuters.
La declaración es la primera confirmación directa de lo que los enviados de Corea del Sur discutieron con Trump después de su viaje a Pyongyang el mes pasado y los medios chinos informaron sobre la visita histórica de Kim a Beijing a finales de marzo.
También confirma la existencia de conversaciones preliminares entre diplomáticos estadounidenses y norcoreanos que se producen a través del llamado «backchannel» ofrecido por las misiones diplomáticas de los Estados Unidos.
Trump sorprendió al mundo cuando aceptó reunirse con Kim a finales de mayo sin condiciones previas luego de meses de ardiente retórica contra el régimen. Ahora, lograr que Corea del Norte aclare lo que significa la desnuclearización será uno de los principales desafíos para la Casa Blanca antes y durante la cumbre.
Durante años, la comprensión estadounidense de la desnuclearización conllevó el «desmantelamiento completo, verificable e irreversible» (CVID) del programa de armas nucleares de Corea del Norte. Corea del Norte ha dicho en repetidas ocasiones que renunciaría a sus armas nucleares solo si los Estados Unidos se desconectaban de la Península Coreana.
Pyongyang recientemente detalló cinco condiciones para la desnuclearización en un comunicado fechado el 6 de julio de 2016, todas relacionadas con la presencia y actividad de los Estados Unidos en la península.
«Para Corea del Norte, ‘desnuclearización’ es un concepto antiguo y altamente condicional que es propio de toda la península de Corea. Significa la eliminación de lo que Pyongyang percibe como una ‘amenaza’, que es el paraguas nuclear de Estados Unidos sobre Corea del Sur y Japón, las fuerzas militares estadounidenses de la Península Coreana y sus activos estratégicos, y en última instancia la alianza entre Estados Unidos y Corea del Sur», dijo Duyeon Kim, investigadora principal del Foro Think Tank de la Península Coreana, con sede en Seúl.
«Pyongyang ha dicho que considerará abandonar sus propias armas nucleares solo cuando se sienta segura por un largo tiempo después de que se elimine la ‘amenaza'», agregó.
Los expertos dudan de que la cumbre propuesta de Kim-Trump dé como resultado que Corea del Norte entregue sus armas a los estándares que los Estados Unidos esperan. De hecho, algunos expertos creen que las conversaciones son solo una estratagema para «ganar tiempo» para continuar el desarrollo de armas nucleares en el terreno.
Sin embargo, Trump expresó optimismo de que se llegaría a un acuerdo con el líder norcoreano. «Hay muchas posibilidades de que Kim Jong Un haga lo correcto para su pueblo y para la humanidad». ¡Esperamos nuestra reunión!» Tuiteó Trump el 28 de marzo.
Según los informes de los medios chinos, Kim se ha comprometido a resolver el problema de la desnuclearización «si Corea del Sur y Estados Unidos responden a nuestros esfuerzos con buena voluntad«.